La carga administrativa de una empresa es en muchos casos un laberinto de datos, cuentas, transacciones y documentación que presentar a la administración con modelos, plazos y buzones de notificaciones electrónicas.
Conociendo cuáles son las tareas administrativas y de gestión de nuestra empresa llega un momento en el que la cantidad de aplicaciones informáticas utilizadas nos supera y además, no nos proporciona datos cruzados entre los diferentes departamentos.
Llegado ese momento es cuando debemos plantearnos diversas cuestiones para valorar la puesta en marcha de un sistema ERP, que centralice nuestras tareas en un único lugar de gestión.
Si ya te lo has planteado deberás hacerte una serie de preguntas:
Debes pensar en soluciones que atiendan a tus necesidades y mejoren la productividad de tu empresa y el día a día de tus empleados, porque así es como crecerás como empresa.