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Plan de carrera: por qué basarse en el análisis salarial

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Plan de carrera: por qué basarse en el análisis salarial

Una de las peores crisis laborales del momento, más allá del desempleo, es la de el trabajador que vive con la sensación de desarrollar un trabajo sin propósito, que solo sirve para satisfacer sus necesidades básicas, sin objetivos claros ni compensaciones adecuadas a lograr nuestro bienestar. Es por eso que las organizaciones deben ir más allá en la organización de sus planes de carrera y su análisis salarial, puesto que no todo es una cuestión de la retribución a final de mes.

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En los planes de carrera se establecen, además de los objetivos, el timing y las competencias propias de la actividad profesional desarrollada, así como la evaluación de los progresos realizados; con la implantación de planes de desarrollo profesional buscamos la evolución, el crecimiento y la realización profesional del trabajador, ligándolo a la adquisición de responsabilidades, dentro de sus competencias, y su recompensa.

Promover las capacidades individuales y colectivas favorecerá al desarrollo personal y profesional de los trabajadores, evitando que se cumpla el Principio de Peter, y facilitando la consecución de los objetivos, tanto individuales como empresariales.

Los trabajadores, como personas buscan la gratificación por los objetivos logrados, la motivación por sentirse valorados y escuchados en su puesto de trabajo, la aportación en el trabajo en equipo… y todo ello hace que no se pueda responder desde la recompensa meramente económica o de ascenso matemático hacia puestos que no se corresponden con sus habilidades.

¿Por qué premiar a alguien por desarrollar bien sus competencias ascendiéndole a un puesto donde no pueda aportar ese valor? ¿No resultaría más satisfactorio conocer las necesidades de cada uno de los puestos y recompensar de una manera más coherente y dirigida a la felicidad de los trabajadores?

Actualmente, y según el estudio de remuneración Europeo 2019 elaborado por Robert Walters, organizaciones y departamentos de Recursos Humanos deberán buscar el modo de comprender las necesidades profesionales de sus colectivos. Algo que requerirá cambios en la cultura corporativa: trabajos flexibles, mayor conciliación laboral, modelos de retribución basados en el rendimiento laboral y que respeten la equidad interna y externa…

Cómo desarrollar un plan basado en el análisis salarial de la empresa

El desarrollo e implantación de un Plan de Carrera es un proyecto complejo que precisa de un análisis detallado de la definición de los puestos de trabajo (DPT), un profundo estudio de las necesidades de conocimiento de la empresa a corto, medio y largo plazo, y la garantía de que dichas necesidades estén alineadas con la estrategia corporativa en el periodo establecido.

Exige un conocimiento exhaustivo del know how interno y de cuáles son los requerimientos para el óptimo desempeño de cada actividad por parte de cada individuo.

Los objetivos de un Plan de Carrera han de ser:

  • El desarrollo personal y colectivo en el entorno laboral.
  • La detección del talento individual y colectivo.
  • La alineación del conocimiento y el desempeño con la estrategia empresarial.
  • La formación continuada.
  • La evaluación del conocimiento y el potencial de desarrollo individual.
  • La maximización de la productividad.

Para lograr estos objetivos deberemos llevar a cabo un estudio pormenorizado de las condiciones de nuestros trabajadores en la empresa para poder elaborar un plan coherente, adecuado a nuestras metas y a nuestro head count, generando un sentimiento motivacional que fomente la mejora y el desarrollo personal.

 

6 Fases para poner el plan de carrera en marcha

  1. Conocer nuestros puestos de trabajo: Como ya hemos indicado anteriormente será necesario conocer los puestos de trabajo de nuestra empresa a través de la descripción minuciosa de cada uno de ellos (DPT). Con este estudio conoceremos las tareas, responsabilidades y cargas de trabajo de cada uno de los puestos.
  2. Realizar un DAFO de nuestra actual política retributiva:  es importante partir de la autocrítica y conocer nuestras debilidades y fortalezas antes de emprender un nuevo plan, que afectará a nuestra cultura empresarial.
  3. Realizar un análisis salarial de la situación actual: deberemos trabajar siempre en función de los datos generados por nuestra empresa, conociendo nuestra estructura salarial, para después poder compararla con tablas salariales del sector en busca de lograr la equidad externa.
  4. Establecer objetivos: es importante contar con objetivos que podamos medir, nuestros indicadores deben ser específicos, alcanzables, realistas y con una temporalización previa. Es lo que conocemos como objetivos SMART.
  5. Elaborar un plan de acciones específicas para la consecución de objetivos: para no caer en la inacción provocada por unos objetivos demasiado amplios deberemos establecer actividades concretas que puedan implementarse de manera escalonada en la organización.
  6. Evaluar el desempeño: cada progreso realizado, cada cambio, por pequeño que sea debe conllevar un seguimiento, ya que solo comprobando la evolución del desempeño y la adecuación de los puestos a las aptitudes nos acercaremos a conseguir los objetivos establecidos.

 

Con qué herramientas contar para alinear los recursos humanos con la nueva realidad de crecimiento

La mejor manera de desarrollar una política retributiva compensatoria equilibrada y efectiva es anticiparse y proyectar los costes que esta implicaría.

Para ello será preciso contar con un software específico de gestión, que nos permita manejar todos los datos de manera sencilla y comprarlos con la realidad salarial del mercado y a nuestra posición dentro de él.

Toda la información relativa a la compensación y beneficios se integrará de manera orgánica a tu funcionamiento interno y todas aquellas decisiones que tomes para incentivar a tu plantilla y hacer que tu empresa sea un objetivo codiciado en el mercado, estarán basadas en información real, cuantificable y revisable de manera permanente.

En definitiva, el plan de desarrollo profesional es una herramienta de gran utilidad y de ayuda para poder recalcar determinados objetivos y una guía que señale el camino para poder crecer profesionalmente y alcanzar todos los objetivos que se pretenden, tanto a nivel personal como empresarial.